Hoy os traigo mi opinión sobre "La patria de los suicidas" de Pascual Martínez, la última propuesta de origen nacional de la colección Siruela Policiaca.
OPINIÓN PERSONAL
El sargento Ernesto Pitana llega procedente de Madrid a su nuevo destino en Iznájar, Córdoba. Y casi no se ha sentado en su despacho y ya se tiene que ocupar de un caso de suicidio. En un paraje de olivos sin fin, un calor sofocante, un cuartel en el que se trabaja lo justo y un pueblo lleno de lugareños hoscos, Pitana se embarcará, cuando la viuda del hombre que se ha suicidado ahorcándose de un olivo le entregue una foto de cinco adolescentes que su marido tenía escondida en un doble fondo de un cajón, en una investigación compleja y en la que nadie cree, en la comarca la tasa de suicidios triplica la del resto de España, en Iznájar, los suicidios se aceptan con resignación pero sin extrañeza. Junto a la psicóloga Lara Campos y la cabo Montero, Pitana se empeña en descubrir un crimen que probablemente no lo sea y se irá ganando poco a poco la animadversión de los lugareños.
Con una prosa sencilla y fluida, con pinceladas de humor procedentes principalmente de la ironía y el cinismo del protagonista, el autor nos mete de lleno en una trama compleja que se desarrolla a ritmo bastante rápido. La novela es lo que suelen llamar los americanos un Country Noir es decir, una historia criminal que se desarrolla en un entorno rural y la ambientación forma parte fundamental de la trama.
Un lugar tranquilo, aislado, donde todos se conocen desde siempre y donde hay secretos escondidos largo tiempo que tal vez es mejor no destapar. Pitana, además de al calor sofocante, se enfrentará a unos lugareños que no tienen ningún interés en contar lo poco o mucho que saben y tendrá también que lidiar con el grupo de 7 guardia civiles que forman el personal de un cuartel de reciente formación y que por diferentes circunstancias lleva tiempo sin mando, tampoco sus subordinados estarán encantados con su nuevo sargento que los pone a trabajar de verdad en cuanto llega de Madrid. Para acabar de topar con dificultades, parece que la gente del lugar da crédito a la mujer del pantano, una leyenda supersticiosa que lleva a suicidarse en el pantano que hay a las afueras del pueblo a quienes escuchan la voz de la mujer que habita las aguas.
Me ha gustado el desarrollo de la investigación policial, metódica, paso a paso, coherente, resulta muy creíble y el final me ha sorprendido y me ha gustado mucho. A parte de la trama principal, el autor añade alguna subtrama más que aporta otros focos de interés como por ejemplo, saber los motivos por los que Ernesto Pitana ha acabado destinado en Iznájar. Además, las relaciones interpersonales que Pitana va forjando en la zona tendrán una relevancia especial, no tanto para el caso como para el propio protagonista.
En cuanto a los personajes que intervienen en la historia, el elenco es reducido y si bien a Ernesto Pitana llegaremos a conocerlo con bastante detalle, me ha faltado saber más cosas sobre el resto de sus compañeros. De fuera del cuartel quiero destacar a Jacinta, la dueña del hostal donde se aloja Pitana mientras busca un hogar más permanente en el pueblo, me ha gustado mucho este personaje femenino.
Para terminar, os comento que entre los 40 municipios con las tasas de suicidios más altas de España, hay 11 que están muy cerca de Alcalá la Real. O lo que es lo mismo, en un área que en la zona es conocida como “el triángulo de los suicidas” y que comprende los territorios próximos a tres municipios que hacen de vértice: Alcalá la Real (Jaén), Priego de Córdoba e Iznájar (Córdoba). En el área de influencia de estas localidades, es más habitual que la gente se quite la vida. Como veis, el autor se ha basado en un hecho real y contrastado para crear su propia historia de ficción.
CONCLUSIÓN
"La patria de los suicidas" de Pascual Martínez es un noir rural con una trama muy bien armada, narrada con fluidez y con un personaje principal, Ernesto Pitana, al que no me importaría encontrarme de nuevo en un futuro. Una novela policíaca entretenida que destaca en originalidad por su ambientación muy bien lograda.
¡Holaaaa!
ResponderEliminarPues no conocía el libro pero después de ver tu opinión veo que merece la pena, la verdad es que hace mucho que no leo nada de novela negra rural pero oye, no me importaría.
Me ha gustado que el autor se haya basado en hechos reales, además no conocía eso del "triángulo de los suicidas", así que gracias por compartir la información.
¡muchos besos!
Conozco bastante ese triángulo. Hay paro y poca salida en unos parajes llenos de encanto. Cuando leí lo de los suicidios me sorprendió mucho y me gustaría poder leer esta novela que tanto está gustando y que te ha seducido.
ResponderEliminarBesos
Tiene muy buena pinta y de hecho ya lo tengo apuntado. Se está escribiendo bastante negro rural en España y además creo que se escribe muy bien. El policía venido de fuera que se encuentra con el recelo de los habitantes del pueblo, los guardias civiles acostumbrados a trabajar poco, la falta de comunicación entre los de la ciudad y los de el campo... Todo ello resulta muy atractivo.
ResponderEliminarUn beso y feliz semana.
Suscribo tus palabras al 100%, es un gran libro en el que te metes en seguida en la trama, quieres saber más y lo disfrutes de principio a fin.
ResponderEliminarBuena reseña.
Besos 💋💋💋
Hola Inés, leída tu reseña no puedo menos que apuntarlo, y eso que iba rogando para que no me gustará que no doy a basto con todo lo que apunto. Desconocía yo ese triángulo de los suicidios y como dice Rosa, en España cuando hablamos de lo nuestro, sabemos hacerlo muy bien. Besos.
ResponderEliminarHola Inés. No conocía éste libro, pero después de lo que cuentas tengo ganas de leerlo. Me lo apunto en mi lista. Besos!!
ResponderEliminarMe resultó entretenida e interesante. Creo que es un buen comienzo para este autor novel al que le seguiré la pista y ojalá nos traiga un poco más de Pitana.
ResponderEliminarBesos.
Pues tiene muy buena pinta. No me importaría leerlo si se cruza en mi camino
ResponderEliminarBesotes!!!
Hola Inés, parece muy interesante, y una propuesta original. Me alegro de que te haya gustado.
ResponderEliminarUn besazo
Humor e ironía, dos de los ingredientes para que me guste una novela. Apuntada queda.
ResponderEliminar¡Muchas gracias por dármela a conocer!
Feliz comienzo de semana!!
Hola. Me encanta. La novela negra rural es mi favorita, esos pueblos donde todos se miran de reojo y algo está pasando pero a veces mejor mirar para otro lado. Lo del tema de suicidios es muy curioso por la zona. Lo que menos me interesa es la cosa personal del protagonista que siempre es lo mismo o parecido. Me la llevo, del tirón.
ResponderEliminarBesos
Con esta no creo que me anime, aunque lo del humor nacido del cinismo del protagonista puede hacerme cambiar de opinión :-)
ResponderEliminarUn beso.
Me atrae porque está ambientada en mi tierra y conozco ese pueblo como la palma de mi mano pero no te veo muy convencida y con todo lo que tengo pendiente he de ir descartando. Besos
ResponderEliminarPues me lo llevo, porque la novela negra en entornos rurales me gusta muchísimo. La de cosas que pasan en los pueblos... mucho peores que en las ciudades. Besote
ResponderEliminarEl personaje de Palomeque es un alter-ego de Cantarella el de las novelas del Comisario Montalbano
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