BASTA CON VIVIR
Autor: Carmen Amoraga
Editorial: Ediciones DESTINO
Formato: Tapa blanda
Páginas: 320
Precio: 18,90 €
SINOPSIS
Pepa es una mujer madura en quiebra emocional. Siente que ha malgastado su vida y culpa al mundo de su aparente desgracia. Sola, enfadada y amargada, siente como una herida la felicidad del resto, y para protegerse del dolor no encuentra otra forma que vivir dentro de una coraza que oculta sus verdaderos sentimientos.
Durante unas vacaciones forzosas, Pepa se ve obligada a reflexionar y a tomar consciencia de los errores que la han llevado a estar donde está. Justo cuando comienza a reconciliarse con sus recuerdos, empieza a observar a una chica embarazada que toma el sol a diario en un banco de la misma plaza en la que Pepa pasea a su perro. Esa joven es Crina, que vive una tragedia ante los ojos impasibles de una sociedad que no quiere verla.
Crina llegó a España engañada por su propia pareja, que la vendió a una red de trata de blancas, y ahora esa red planea vender al bebé que espera. Pepa, inmersa en el proceso de rehabilitación de su invalidez emocional, es la única persona que puede ver más allá de lo que se ve, y decide volcarse en ayudar a esa desconocida.
AUTOR
Carmen Amoraga (Picanya, Valencia, 1969) es licenciada en Ciencias de la Información y ha trabajado para radio y televisión. Ha sido columnista en diversos medios como Levante-EMV, Cadena Ser, Cartelera Turia, Mujer hoy o Harper's Bazaar España. Ha sido asesora en relaciones con los medios de comunicación de la Universitat de València y actualmente es Directora General de Cultura y Patrimonio de la Generalitat Valenciana. Es autora de Para que nada se pierda (1997, II Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla), La larga noche (2003, Premio de la Crítica Valenciana), Algo tan parecido al amor (finalista del Premio Nadal 2007), El tiempo mientras tanto (finalista del Premio Planeta 2010), El rayo dormido (Destino, 2012) y La vida era eso (Premio Nadal 2014), entre otros.
OPINIÓN
"Basta con vivir" ha sido mi primer contacto lector con Carmen Amoraga y sin duda volveré a leer a esta autora que ha sabido conquistarme tanto con la historia contada en esta novela como con la manera de narrarla.
Esta es la historia de dos mujeres, dos mujeres muy diferentes pero ambas con un nexo común: la dureza de sus vidas.
Por un lado conoceremos a Pepa, una cincuentona triste, amargada, solitaria e infeliz. Ve los sucesos de toda su vida bajo un prisma sesgado, el propio y eso la lleva a una inconformidad permanente con los demás. Nadie la ha querido y nadie la querrá jamás como ella merece. Una ruptura sentimental y la superación en soledad de una grave enfermedad la han trasformado en una mujer sola, tremendamente sola.
Por otro lado está Crina, una joven rumana que tenía una vida feliz en su país, una familia que la quería, una carrera de medicina en ciernes y un novio que la cuidaba. Ahora Crina está en Valencia, víctima del tráfico de personas su vida se ha convertido en un auténtico infierno del que no consigue escapar. Crina también está sola, muy sola.
Hay quien podría ser feliz y no se lo permite a sí mismo y hay quien desea ser feliz a toda costa y no encuentra la manera de lograrlo.
Dos mujeres que viven en el mismo barrio, se ven a menudo en el parque pero no han intercambiado una sola palabra. Tal vez si un día eso cambiara la vida de esas dos mujeres se trasformaría por completo, tal vez un día...
Hay escritores que tienen la capacidad de contarnos cosas comunes, historias corrientes de una manera especial, transformando esas vidas cotidianas en algo valioso e interesante, consiguiendo que esos personajes y sus cuitas nos interesen y leamos una novela con un deleite singular. Así escribe Carmen Amoraga, con sencillez y ternura pero con una fuerza que nos arrastra en la lectura de las páginas del libro con la sensación de estar ante algo mágico.
La novela trae consigo una denuncia social clara sobre el tráfico de mujeres y la prostitución haciendo que el lector reflexione sobre un tema de sobras conocido pero dándole un punto de vista más humano, dándonos un golpe manifiesto al recordarnos que mucha gente necesita ayuda y siempre o casi siempre pasamos de largo con las típicas excusas de "yo no quiero líos", "bastante tengo yo con lo mío", "a saber si no hace lo que hace porque eso le es más cómodo que buscar un trabajo decente". No los vemos pero en realidad no queremos verlos, son invisibles en nuestra sociedad. Hay un señor que está a la puerta del supermercado donde voy a comprar prácticamente a diario, pide dinero, incluso a veces le he dejado unas monedas, pero si me enseñaran unas fotos para que lo identificara me sería completamente imposible, me avergüenza decir que jamás le he mirado a los ojos, es cierto, es invisible para mí y para todos los demás que pasamos a su lado. La historia de Crina nos muestra sin tapujos como cambia la vida de una joven normal para transformarse en algo horrible, en la que el miedo paraliza a esas mujeres y aunque se les presenten algunas oportunidades de escapar son incapaces de hacerlo sin ayuda. Una historia terrible que me ha impresionado.
Sin embargo, la historia de Pepa ha sido la que más me ha tocado el corazón. Ya sabemos que en esto de las lecturas influye en ocasiones, de forma definitiva, el bagaje personal de cada lector. Me he visto totalmente identificada con una parte de los sentimientos de Pepa y es curioso, pero me ha dolido más su vida que la de Crina. Quizá haber leído esta novela hace un año me hubiera servido como terapia personal y me hubiera empujado hacía algo que ahora, dadas las circunstancias, ya es totalmente imposible.
El ritmo de la novela es tranquilo y sosegado sin embargo, pasan muchísimas cosas a las protagonistas, incluso notas una sensación de suspense que invita a leer sin pausa, quieres saber que pasará, llegar al final y enterarte que será de Crina y de Pepa, si acabarán uniendo sus caminos o solo se rozarán en ese parque donde se encuentran a menudo. Y claro, averiguar si ambas serán capaces de enderezar sus vidas. La narración es seria, reflexiva, pero la autora introduce unas notas de sutil humor que hace sonreír en ocasiones pero desde luego, también pensar. A veces para decir las cosas más importantes el humor y la ironía son más adecuados que una frase lapidaria.
Otra cosa que me ha gustado mucho es la forma que ha ideado la autora para enfocar el desenlace de la novela, no voy a contar nada pero solo os diré que me ha sorprendido gratamente.
Una de las claves de la novela está en sus personajes y no solo en los principales. Crina y Pepa están vivas, existen y las acompañas en la lectura sufriendo con ellas, intentando animarlas a tomar decisiones, a abrir de par en par las puertas que se les van poniendo por delante. A pesar de la tristeza y el dolor que desprenden consigues mantener el optimismo leyendo y confiando en que ambas encuentren soluciones y por fin vivan, porque hay veces que no hace falta más, basta solamente con vivir.
CONCLUSIÓN
"Basta con vivir" de Carmen Amoraga nos sumerge en la historia de dos mujeres reales, en sus vidas cotidianas contadas de una forma tan certera que no las leemos, las vivimos, las sentimos en cada página. Historias tristes, duras pero siempre con la esperanza en el horizonte. Si conocéis a la autora seguro que ya tenéis en mente esta lectura y si aún no la conocéis, como me pasaba a mí, os recomiendo esta novela porque estoy segura que quedaréis tan encantados como yo.
Hay escritores que tienen la capacidad de contarnos cosas comunes, historias corrientes de una manera especial, transformando esas vidas cotidianas en algo valioso e interesante, consiguiendo que esos personajes y sus cuitas nos interesen y leamos una novela con un deleite singular. Así escribe Carmen Amoraga, con sencillez y ternura pero con una fuerza que nos arrastra en la lectura de las páginas del libro con la sensación de estar ante algo mágico.
La novela trae consigo una denuncia social clara sobre el tráfico de mujeres y la prostitución haciendo que el lector reflexione sobre un tema de sobras conocido pero dándole un punto de vista más humano, dándonos un golpe manifiesto al recordarnos que mucha gente necesita ayuda y siempre o casi siempre pasamos de largo con las típicas excusas de "yo no quiero líos", "bastante tengo yo con lo mío", "a saber si no hace lo que hace porque eso le es más cómodo que buscar un trabajo decente". No los vemos pero en realidad no queremos verlos, son invisibles en nuestra sociedad. Hay un señor que está a la puerta del supermercado donde voy a comprar prácticamente a diario, pide dinero, incluso a veces le he dejado unas monedas, pero si me enseñaran unas fotos para que lo identificara me sería completamente imposible, me avergüenza decir que jamás le he mirado a los ojos, es cierto, es invisible para mí y para todos los demás que pasamos a su lado. La historia de Crina nos muestra sin tapujos como cambia la vida de una joven normal para transformarse en algo horrible, en la que el miedo paraliza a esas mujeres y aunque se les presenten algunas oportunidades de escapar son incapaces de hacerlo sin ayuda. Una historia terrible que me ha impresionado.
Sin embargo, la historia de Pepa ha sido la que más me ha tocado el corazón. Ya sabemos que en esto de las lecturas influye en ocasiones, de forma definitiva, el bagaje personal de cada lector. Me he visto totalmente identificada con una parte de los sentimientos de Pepa y es curioso, pero me ha dolido más su vida que la de Crina. Quizá haber leído esta novela hace un año me hubiera servido como terapia personal y me hubiera empujado hacía algo que ahora, dadas las circunstancias, ya es totalmente imposible.
El ritmo de la novela es tranquilo y sosegado sin embargo, pasan muchísimas cosas a las protagonistas, incluso notas una sensación de suspense que invita a leer sin pausa, quieres saber que pasará, llegar al final y enterarte que será de Crina y de Pepa, si acabarán uniendo sus caminos o solo se rozarán en ese parque donde se encuentran a menudo. Y claro, averiguar si ambas serán capaces de enderezar sus vidas. La narración es seria, reflexiva, pero la autora introduce unas notas de sutil humor que hace sonreír en ocasiones pero desde luego, también pensar. A veces para decir las cosas más importantes el humor y la ironía son más adecuados que una frase lapidaria.
Otra cosa que me ha gustado mucho es la forma que ha ideado la autora para enfocar el desenlace de la novela, no voy a contar nada pero solo os diré que me ha sorprendido gratamente.
Una de las claves de la novela está en sus personajes y no solo en los principales. Crina y Pepa están vivas, existen y las acompañas en la lectura sufriendo con ellas, intentando animarlas a tomar decisiones, a abrir de par en par las puertas que se les van poniendo por delante. A pesar de la tristeza y el dolor que desprenden consigues mantener el optimismo leyendo y confiando en que ambas encuentren soluciones y por fin vivan, porque hay veces que no hace falta más, basta solamente con vivir.
CONCLUSIÓN
"Basta con vivir" de Carmen Amoraga nos sumerge en la historia de dos mujeres reales, en sus vidas cotidianas contadas de una forma tan certera que no las leemos, las vivimos, las sentimos en cada página. Historias tristes, duras pero siempre con la esperanza en el horizonte. Si conocéis a la autora seguro que ya tenéis en mente esta lectura y si aún no la conocéis, como me pasaba a mí, os recomiendo esta novela porque estoy segura que quedaréis tan encantados como yo.